Ahí están son muchos ángeles, está mi papá también, mis tías, es hora de partir. Siento alivio, paz, armonía, veo y siento como voy dejando mi cuerpo, el cuerpo que por 67 años me condujo por esta vida terrenal, y que en estos últimos meses solo me trajo dolor y desolación.
No lloren mis niñas, voy a estar bien en un mundo sin sufrimiento, sin llanto, ni desesperación; quiero abrazarlas no puedo, ya no estoy en ese cuerpo, ya no estoy en esa habitación del hospital, se abrió un portal con bonitos colores, huele a jazmín y vainilla, los angeles me esperan, no tienen alas, tienen rostros de bondad, debo irme ya!
No me lloren más, que no me dejan despegar. Por fin siento paz, pronto entenderán está experiencia única y personal. No morimos solos, vienen rostros conocidos del más allá, sin cuerpo físico, solo cuerpos de luz; no se asustarán, somos seres espirituales, no somos esas personas de carne y hueso, solo somos la esencia que fuimos en la tierra y esa personalidad que nos caracterizaba.
Hasta pronto mis niñas, lo hicieron bien, no sé reprochen, no sé culpen, que así tenía que ser, no había otra manera, ya estaba escrito que así sería mi final. Estarán bien, mientras volvamos a reunirnos en el mundo espiritual.
sublimefrases 